Se refiere a cuando existe un retraso en la adquisición de habilidades esperadas a una determinada edad tales como: 

  • Levantar la cabeza durante el boca abajo. 
  • Mantener la posición boca abajo con comodidad. 
  • Realizar giros.

La adquisición de habilidades motrices en forma y tiempos determinados refleja la maduración funcional desde la cabeza hasta los pies. Este proceso normal y coordinado promueve el desarrollo cognitivo y perceptual.

Evaluación y diagnóstico:

En primera instancia se realiza una evaluación inicial en la que se valorará el desarrollo motor, las reacciones posturales, los reflejos, entre otras cosas. La detección e intervención temprana es muy importante, sobre todo en los primeros meses/años del bebé

Intervención:

Si el niño precisa de tratamiento de kinesiología, nuestro objetivo será rehabilitar los problemas motrices, estimular las capacidades de movimiento y minimizar en lo posible deformaciones; a través de programas de ejercicios individualizados y personalizados para cada niño (a).